La guerra comercial iniciada por Donald Trump afectará principalmente a EE.UU., que experimentará un aumento de precios y una posible contracción económica, lo que a su vez frenará el crecimiento global.
Los aranceles impuestos a México, Canadá y China afectarán el libre comercio y las cadenas de valor globales, lo que reducirá el consumo, dañará la confianza empresarial y aumentará la inflación en EE.UU. Se anticipa que el PIB estadounidense podría contraerse un 2.8 % en el primer trimestre de 2025.
Además, las tensiones comerciales también afectarán a la UE, especialmente a sectores como el automóvil y la agroindustria, que enfrentan incertidumbre debido a las posibles nuevas tarifas.
Los aranceles impuestos a México, Canadá y China afectarán el libre comercio y las cadenas de valor globales, lo que reducirá el consumo, dañará la confianza empresarial y aumentará la inflación en EE.UU. Se anticipa que el PIB estadounidense podría contraerse un 2.8 % en el primer trimestre de 2025.
Además, las tensiones comerciales también afectarán a la UE, especialmente a sectores como el automóvil y la agroindustria, que enfrentan incertidumbre debido a las posibles nuevas tarifas.